Camino despacio,
un tímido sol se posa sobre mis hombros,
la suave brisa huele a recuerdos,
trae las fragancias y roza mi cuerpo.
Camino despacio,
porque quiero
porque escucho la voz del pasado,
y aunque no me gusta, la amo.
El techo se apaga por las
nubes
me trae un desasosiego ya
esperado,
pues aquí puedo llorar,
sin suplicar,
sin pedir nada a cambio.
En la soledad buscada,
en el largo camino andado
mis lágrimas son agua clara.
Lloro por los recuerdos,
por aquellos que se fueron y no volverán.
Lloro porque te quiero
y te alejas cada vez más.
Mis lágrimas son agua clara
sólo limpian mi mirada,
y de vez en cuando paseo
paseo despacio
porque quiero,
porque te espero
en mi dulce rincón de llorar.