Llévame de paseo

Llévame a pasear contigo,
por los caminos más  llanos o más  abruptos, pero llévame.
Por senderos con frondosa vegetación, donde haya  moras, y endulcemos nuestros labios,
por la orilla del río o entre los pinos,
llévame  a visitar hormigueros o mirar las aves, pero llėvame.
 Así  cuando me dejes, recordaré el resplandor del atardecer,
tus manos, tus ojos mirando adelante
y yo mirándote.
Asi recordaré  que soñar es real, que tú  existes,
y desde la oscuridad esperaré  al próximo  paseo,
contigo.

Lágrimas en mi rincón

Camino despacio,

un tímido sol se posa sobre mis hombros,

la suave brisa huele a recuerdos,

 trae las fragancias y  roza mi cuerpo.

Camino despacio,

porque quiero

porque escucho la voz del pasado,

y aunque no me gusta, la amo.

El  techo se apaga por las nubes

me trae  un desasosiego ya esperado,

pues aquí puedo llorar,

sin suplicar,

sin pedir nada a cambio.

En la soledad buscada,

en el largo camino andado

mis lágrimas son agua clara.

Lloro por los recuerdos,

por aquellos que se fueron y no volverán.

Lloro porque te quiero

y te alejas cada vez más.

Mis lágrimas son agua clara

sólo limpian mi mirada,

y de vez en cuando paseo

paseo despacio

porque quiero,  

porque te espero

en mi dulce rincón de llorar.

Me quedo en las nubes

Qué  importa subir ó bajar cuando no vives en la realidad,

porque flotas,

porque fluyes,

porque vuelas entre las nubes.

Nada importa cuando nada ves.

La aplastante ignorancia empapa tus sentidos y miras a otro lado.

Los caminos empedrados impiden ir a la realidad, demasiados tropiezos,

mejor atrás  ó quizás arriba,

quedarse en el no saber no duele,

bailar con los ojos cerrados, caminar dormido, no duele.

desapego ante el ruido y aprecio al silencio.

Aprecio al silencio en cada  paso hacia las ansiadas nubes,

hacia los momentos desconocidos y los que nunca pasarán,

caminando en el aire, sin tiempo, sin razón,

porque nada importa cuando nada ves,

porque flotas…    y porque ahí  en las nubes no duele.

SU ULTIMO DIA

 Su último día

 

Quizás éste sea su último día

 y no le importe.

El equipaje es ligero, su vida pesada. 

Recuerdos que fluyen,  vienen y van, no desaparecen. 

La mirada hacia su  amor

ahora dormido dentro de una fotografía,

aun  susurra su nombre cuando la mira.

Sin  rencores ni  odios, ahora llegó la paz, 

 la espera venció a su tiempo

y el tiempo venció a su guerra.

Lento caminar hacia el destino,

sus pasos cansados buscan apoyo que ya no llega.

Sólo en su sillón con la manos entrelazadas se daba calor

 y el frío de la soledad se lo quitaba. 

Demasiadas vueltas a su reloj,

quizás se pare pronto,

a lo mejor cuando duerma,

dormirá sus cincos sentidos mientras recuerda el olor de su amada,

dormirá sin despertar, cuando encuentre su mirada,

y juntos caminarán sin más peso a sus espaldas

Ocupa de tu corazón

Llegué sin avisar, ni siquiera llamé a tu puerta,  vi un hueco vacío en tu corazón y me instalé.
Ocupa de tu corazón, presa de tus labios
que me atan con suaves cadenas
y no quiero soltarlas,
cautiva de tu olor
que impregna mi piel
y no quiero quitarlo,
prisionera de tus hechos y dichos
que me perturban y amansan.
Ocupa de tu corazón a tiempo completo.
Ocupa de tu vida a tiempo parcial,
esperando a la sombra de los olmos para verte,
caminando despacio hacia ti mientras te alejas.
No quiero caer en el olvido, ni en tentaciones de ilusión,
haré de inmediato la maleta,
si necesitas  espacio,
y seguiré soñando imposibles contigo
y contigo seguiré soñando.

Déjame soñar

No juegues con la sordidez de mi soledad
y déjame dormir,
posa a mi dulce amor en la cama
mientras duermo,
quiero soñar con mariposas,
con hojas de árboles que caen
en el suelo de mi habitación
con flores que nunca se marchitan,
déjame soñar,
deja que su aroma llegue a mis entrañas
deja que Él  sea mi alma gemela
y que su amor crezca  en mi almohada.
Anochece
cierro los ojos poco a poco
siento una  soledad devastadora,
quiero  ordenar mis sueños
y que  en todos ellos
pueda besar su cara,
que nuestro amor se renueve con el recuerdo,
y al despertar me haga sentir  enamorada.

Eres pura esencia

Un atardecer contigo....

Me entregas tu esencia,

oculta tras un envoltorio algo curtido,

quizás por el paso del tiempo,

o por tus pasos recorridos

o quizás por plantar demasiadas flores en invierno.

Esa esencia,

a través de tu mirada veo tus sentimientos

tan lúcidos para amar, tan serenos para olvidar.

Por tu sonrisa, mi corazón late acelerado

 y mis impulsos sintonizan con tus manos,

tus labios me buscan a escondidas

y me lanzas besos furtivos,  para mí deseados.

Como amantes abrimos caminos,

curamos viejas heridas y las cerramos,

como amados tenemos miedo,

y si bailamos juntos

pecho contra pecho,

siento tu esencia en mi cuerpo.

Amor y Miedo

En dos mundos.

Uno,

dónde las nubes son claras y libres,

llueve paz y los paraguas no son impermeables,

los rayos del sol nos iluminan,

y las estrellas tejen un manto

para las noches más frías,

el cielo se toca con las miradas,

y su azul cubre el ocaso,

las manos hablan,

los ojos escuchan felices

y las sonrisas dibujan los rostros
que seguros de sí mismos,
al amor le dan su espacio.

Otro,

dónde la lluvia duele,

y el corazón llora con amargura

¡de qué sirven los paraguas!

si las nubes mojan la luna,

labios tensos y sellados,

silencios en las palabras,

las miradas caen al suelo,

y las sonrisas se ocultan

por un oscuro velo.

Gritar en el vacío,

desconfiar de los sentidos

y los besos temblorosos

se esfuman en el olvido.

En los dos mundos habitamos,

en los dos amamos

y en los dos, el amor y el miedo

se dan la mano.

Fluir

Deja correr el agua por el río,
deja que llegue al mar,
deja correr el viento,
que roce el horizonte,
y no lo puedas alcanzar,
deja correr las gotas de lluvia por tu cara,
que  vayan a tocar tus labios
y así  te puedan besar,
deja rodar las piedras por la ladera,
¡ya se detendrán!.
Que el sol despierte y se duerma,
y si se oculta,  ya volverá,
deja pasar tus pensamientos
los que,  llenos de incertidumbres,
te hacen dudar,
que fluyan en el infinito,
y si vuelven,
el viento los soplará,
deja que la luna guíe tu sueño
y cuando despiertes
vuelve a soñar,
deja que todo fluya,
y lo que necesites,
¡ya se quedará!.

Amar sin ruido

Tan serena como triste
tan lúcida como apagada
tan tierna como irascible
tan dolida,  tan amada,
amada por tus manos
que nunca llegan,
deseada por el ardor de tu mirada .
Amada por tus labios
como yo amo a los tuyos
y los beso a través del cristal de una pantalla.
¿Donde guardas tus recuerdos?
donde guardo yo los míos
quiero entrar ahí,
abreme tu conciencia, tus deseos y tus sueños
déjame soñar contigo,
volaremos sobre las dunas del desierto
donde no haya árboles para no hacer ruido,
silencio entre los sentidos,
sólo respirar, respirar contigo.
Quizás el cielo sea nuestro
o quizás todo quede en el olvido.

Una isla en tu mar

Quererte es escuchar tu voz en el silencio,

mirar tu cara entre las sombras y tocarte

no saber que día es hoy,

y que mañana sea amarte,

pasar al otro  lado de la calle,

seguir tus huellas en la arena,                 

y al pisar tus pisadas,
sentir que tu corazón late,

no pretendo invadir tus huecos

tan solo un trocito de  isla, en tu mar,

donde el reflejo del sol me hace sentir.

Viajaremos por el fondo, si quieres,

entre las nubes rosas de coral,

pero no sueltes mi mano, pues no sé nadar,

sólo si subimos a la superficie

suéltala para acariciarme y 

miraremos al horizonte juntos,

y si quieres
volveremos a esa isla en tu mar.

Niño perdido

Fuiste un niño perdido

dentro de mi jardín,

siempre encontraste calor,
y un refugio para amar.

Tu hogar frío y solitario,

donde el amor se ocultaba detrás de las botellas de vino rancio,

allí pequeño  niño, te escondías tras los barrotes,
allí  estabas protegido,

el televisor te daba el amor tan ansiado,

allí pequeño niño,  temblabas al oír los portazos,

mientras mordisqueabas tus uñas, ya desgastadas,

tus oídos tapados y tus ojos cerrados
no querían sentir, 

no querían buscar,
no podían amar.

Pequeño niño perdido,

siempre volvías a mi jardín,

olías todas las flores, y sonreías,

comías ese pequeño bocadillo de felicidad,

bebías agua cristalina, tanto como tus ojos brillantes.

Dentro de mi jardín las saetas del reloj bailaban 

y tu no querías dejar de bailar,

colores y sabores ponían esperanza  a las tardes de invierno.

Esas malditas tardes de invierno , mi pequeño,
hacían que amases la oscuridad en el jardín

y odiases la luz en tu nido,

la soledad buscada te hacía dormir,

y soñar con tu libertad.

Sueña pequeño niño perdido
y cuando despiertes
volverás.

Un regalo para mi

Tanto tiempo esperé
tantos días pensé dónde estábas
tantas horas de incertidumbre,
miraba el cielo con mi soledad de la mano,
no quería  dejarla, era mi compañía,
lo dejé  pasar, pero no pasaba.
De pronto lo recibí ,
sin esperar, llegó mi regalo,
empecé a desenvolverlo,
poco a poco
y cada día más me gustaba .
Una ilusión, una esperanza,
en las nubes podía guardarlo.
Llovía y llovía ,  mi regalo mojado
yo llena  de lágrimas,
mi más preciado, alguien me lo quitaba.
Escalera dorada para llegar al sol
con mi regalo entre los brazos
subía para secarlo
lo seguía mirando
nunca perdí la esperanza.
Hoy aun la tengo,
a veces llueve, a veces  se moja,
 a veces  lloro,
a veces subo a verlo  a las nubes
y lo seco  al sol.
La vida me lo trajo y no  quiero que se vaya.

Jugando en el desorden

Puerta abierta,
 veo un lugar mágico  y caótico,
la mezcla de colores da luz a los
cuerpos inertes esparcidos por el suelo,
el caos se apodera del estar.
Desorden.
Camino dudoso
¿por dónde empezar a ordenar?
Primero jugar,
de pronto, los cuerpos se mueven,
aquí y allá,
presente, pasado, futuro, no importa,
arriba o abajo, izquiera o derecha.
Todo es posible.
Piratas en el cielo luchando  con espadas de inocencia,
cientos de animales caminando por el gran océano de tela,
 rodeados de muñecos custodiando un barco.
Figuras de plastilina marcando los senderos, dando paso a las hadas y duendes del bosque que bailan al son de la música.
Música que ordena el desorden,
música que hace volar la imaginación.
Alli, en esa habitación llena de juguetes,
no existe el caos porque allí
en cada rincón,  hay vida.

Así te quiero

Asi te quiero,
tan silencioso en tus miradas,
sereno en tus dulces palabras,
poniendo suavidad en tus manos para tocarme.
Así me gustas,
deseoso de nuestros besos, de tus labios y los míos,
tan delicado como la pluma que acaricia mi piel,
sensaciones de placer mientras recorre mi cuerpo.
Sabes amarme mientras  te amo,
sabes encender mi llama y mantenerla.
Asi te quiero,
libre para soñar.
Soñemos juntos,
soñemos que nunca nos separamos,
soñemos...

Mi bolso de viaje

En mi bolso de viaje
llevo un neceser de ternura,
unas toallitas  que limpian las caras tristes,
el pijama para vestirme en los mejores sueños contigo,
un frasco de amor para perfumar mis sentidos
y embriagarte con mi olor.
Llevo algo de ropa para vestir mi alma por si se queda desnuda.
Pero no llevo zapatillas.
No. Tú vistes mis pies descalzos con serenidad, les das un  toque de amor y los proteges.
Mi bolso va y viene, se carga de sensaciones  que viajan de un lado a otro,
dispuesto siempre a buscarte.
En mi bolso de viaje  cabes TÚ.

En el ser

Un mundo por descubrir,
 mi mundo, el nuestro.
Cada interior se asoma, busca,
quiere salir a ver la luz.
Una luz apagada por la incertidumbre.
Búsqueda de la felicidad  entre tinieblas,
cada vez más  densas.
Búsqueda  del amor, ese amor que nunca llega,
quizás  porque  no existe.
Búsqueda  de la soledad  deseada, escondida entre las sombras.
Nada, no hay nada fuera.
Vuelve tu mirada hacia adentro
indaga en tu corazón,
aromas de felicidad envuelven  el amor,
busca un poco más,
encontrarás el mundo que siempre  buscabas,
sin saber que el mundo eras tú.